Hay fuerzas secretas que para quienes están abiertos a ellas, logran descubrir pequeñas certezas, semillas de bondad que hacen las cosas distintas:
El poder, la violencia, el chantaje, la manipulación, el engaño, la opresión, y tantas caras de la misma moneda, son flor de un día, no son eternas, ni duraderas, acabas perdiendo la vida, pues siempre encontrarás, a quien ambicione más que tú.
Pero si quieres abrirte a lo nuevo, a esas fuerzas secretas y nada convencionales... Entonces deberás probar cosas como:
- Aceptar tus errores y aprender de ellos
- Pedir disculpas
- Lograr que otro se sienta valorado
- Reírte de ti mismo cada mañana frente al espejo
- Relativizar una ofensa
- Renunciar en favor de quien más lo necesita
- Servir
- Hacer un favor incómodo
- Dar la cara por quienes son pisados
- Escuchar a quien es capaz de aburrir a las ovejas
- Reconocer que nadie es imprescindible, y tú tampoco
- Hacer un gesto noble sin que te lo agradezcan
- Sacrificarte por un desconocido
- ..... y otros tantos parecidos...
Así descubrirás, que hay un camino, que nos recuerda que esto de amar tiene mucho de opción y de gratuito a la vez. Un amor así, nos hace fuertes, conscientes de la propia fragilidad, y a la vez, confiados en que nuestra principal tarea no es ser perfectos, sino sencillamente hacer el bien por donde pasemos.