"NO HAY TERRITORIO COMANCHE PARA DIOS"

"Quien roba a un ladrón tiene cien años de perdón"... Ya que Javier Vitoria reconoce que este título de su nuevo libro (aprovecho a recomendarlo) se lo robó a Arturo Pérez Reverte ... yo me tomo la licencia de tomarlo prestado... ¡Gracias, Javier!

No hay territorio comanche para Dios... me reafirma en la convicción que no hay lugar donde Dios no se haga presente. La certeza que el Dios de Jesús de Nazaret, se hace amigo de las situaciones difíciles, de los momentos duros, y especialmente cercano de quienes sufren el olvido, el rechazo o la humillación.

En medio de lo cotidiano hay tierras inhóspitas, prohibidas, escondidas, a donde nadie quiere ir... las tierras de la enfermedad mental, la soledad, la cárcel, el rechazo, los abusos, el fracaso, el dolor, la persecución, la impotencia, la muerte furtiva, ... tierras por las que nadie quiere transitar, y sin embargo, en las que uno se puede ver arrojado en ellas, como por arte de magia, de un mal azar, ¡o yo que sé!, casualidades de la vida, que nos llevan donde no queremos. Pues a quienes en algún momento nos hayamos podido encontrar en algunas de ellas, nos debemos recordar que nunca hemos estado solos, y hacer memoria de esas personas, esos gestos y palabras oportunas, que nos han descubierto la presencia de ese Dios Com-pasivo.

Celebremos cada día la certeza de que en lo profundamente humano, en lo divinamente profano, es donde intuimos esa secreta presencia de un Dios, que ama con ternura de "abba"(papá) nuestra propia debilidad y fragilidad.

Un Dios así, nos anima a recorrer, una y otra vez, con valentía y confianza esos territorios inhóspitos para hacer presente esos gestos de amor cotidianos que tanto necesitamos. ¡Cuándo se nos meterá en la cabeza que la única perfección a la que hay que aspirar es la del amor!... todo lo demás es pérdida de tiempo y intentos inútiles de felicidad. Gracias.