UNA ALEGRÍA SECRETA....

...Que no se oculta, ni juega al escondite. Es una alegría que se va descubriendo en el interior de cada uno. Que se va confirmando poco a poco, con experiencias, con gestos , con miradas,... una alegría, que nunca nos la arrebatarán. Ni las penurias, ni la enfermedad, ni la injusticia, ni tampoco la muerte, Miguel Ángel.
Somos seres visitados.Como si de ángeles se tratasen, somos sorprendidos por amigos, hermanos, conocidos, incluso desconocidos, que dejan en nosotros, sin avisar, esa semilla de amor, que bendicen nuestra vida. La hacen más digna, más habitable, sencillamente un poco más amada. 
A pesar de nuestra fragilidad y limitaciones, con todas nuestras contradicciones, ¡qué a veces son demasiadas!, somos  visitados por quienes sabe reconocer, en cada uno de nosotros, aquello que más necesitamos. Eso produce en nosotros una profunda alegría, de la que brota un agradecimiento del que no siempre somos capaces de expresar. Pero ahí queda, ¡no importa amigo!, en otra ocasión seré capaz...
Es una alegría profunda, que nos recuerda esa verdad última, somos seres amados, como somos, sin más, sin méritos ni medallas, sin reconocimientos, sencillamente porque somos hijos, hermanos, humanos. Dios nos hizo así, y punto. Poco más hay que decir. ¡Perdón!, si una invitación última, visitemos, hagámonos presentes, acompañemos, hagamos las cosas algo diferentes... Gracias.