miércoles, 2 de marzo de 2011

¡MAMÁ!, QUIERO SER FUNCIONARIO

Vaya por delante mi respeto a los funcionarios y su tarea. Mi madre lo fue. Pero quería compartir con vosotros una reflexión que me ha suscitado una charlas recientemente. 
Recuerdo como si fuera hoy el día que le dije a mi madre, con tan solo dieciocho años, que quería ser religioso menesiano. Ella ya lo barruntaba, pero guardando la calma, me dijo, "¿lo has pensado bien? "... pero me respetó... hubo quienes alucinaron y pensaron este no dura,... o quienes lo veían como una pérdida de tiempo o un calentón del chico, ¡ya se le pasará!...
Pero si le hubiese dicho mamá, quiero ser funcionario, ...¡eso es otra cosa!, es una cuestión bien distinta, pensar en tu futuro, invertir en tu seguridad, asegurarte la estabilidad de por vida... ¡vamos!, un chollazo.
No quiero ironizar, ni deslegitimar una opción loable. A mi madre le permitió, no sin ayuda, sacar adelante a cinco hijos. Pero esta imagen, me ha llevado a pensar de lo sobrevalorado que tenemos la seguridad en un contexto donde ni es posible, ni problamente sea el valor que más aporte para salir adelante en situación de crisis.
¿A que aspiramos en situaciones de crisis? ¿Nuestro único referente es garantizar mi seguridad?¿Quién la va garantizar? ¿El estado? Lo siento, pero creo que no va poder ser. Ni tiene los posibles económicos, ni la hondura  y la profundidad humana.
Estamos en una profunda crisis, que no nos la creemos del todo, y aunque experimetamos sus consecuencias, unos más que otros, todavía pensamos que "alguien", no sabemos muy bien quien, nos sacará de este embrollo. 
Pero quisiera preguntarme, ¿qué estamos dispuestos a aportar cada uno de nosotros para salir de esta situación?¿Se nos ha ocurrido pensar que el valor de la seguridad, no tan absoluto ni viable? Ha llegado el momento de buscar otros referentes que puedan dar respuestas a esta situación de crisis, angustiosa para muchos. Es necesario buscar, preguntarse, recabar apoyos, plantearse otros valores que den más cobertura y una respuesta más efectiva, que nos aporte ese referente para dar una respuesta con sentido.
Como ya nos apunta Jose Mª Olaizola, estamos en crisis, pero no sólo económica, también política, cultural, social y afectiva... podemos  mirar al otro lado, podemos dramatizar y ponernos apocalípticos, pero también podemos ser realista, acercarnos con respeto a la realidad que vivimos y  vivirlo como un tiempo de oportunidades. 
Quizá ahora será necesario buscar, profundizar, preguntarnos, ... pararnos a pensar para encontrar esas respuestas que más necesitamos. Gracias.

1 comentario:

  1. Opositar en busca de un empleo público es la mejor manera de encontrar solución efectiva y rápida al desempleo y a la crisis económica. Trabajar en el Estado implica estar en posesión de un empleo bien remunerado que cuenta con amplia flexibilidad horaria y que, además, ofrece estabilidad laboral.

    ResponderEliminar