Nuestra mirada sería distinta
más crítica con lo que vemos,
más humana con lo que tocamos,
más tierna con los que sufren.
¿Y si el corazón cambiase?
Sí el mio, el tuyo, los vuestros...
Nuestros gestos serían
más modelados por el amor,
más cercanos por com-pasión,
más justos por dignidad.
¿Y si de verdad el corazón cambiase?
El mio, el tuyo, los vuestros...
La justicia no viajaría en patera,
la esperanza no bailaría con la bolsa,
la humanidad no sería desahuciada.
Si el corazón cambiase,
El mio, el tuyo, los vuestros...
Hoy,
escucharía más y hablaría menos,
compartiría más y acumularía menos,
abrazaría más y juzgaría menos.
¿Quieres que cambie tu corazón?
Yo, sí, pero solo no puedo, ¿me ayudas?
No hay comentarios:
Publicar un comentario