jueves, 14 de octubre de 2010

APORTANDO LUZ...

Nos gusta demasiado el equilibrio, sobretodo ese el que favorece nuestra estabilidad. Percibimos la estabilidad como un bien en sí mismo, entre otras cosas, porque favorece nuestro desarrollo personal.
Aunque pueda ser legítimo buscar, desear este equilibrio, es de justicia reconocer que dicha estabilidad es un lujo, que muy pocas personas disfrutamos. Es necesario "hacer memoria", "re-cordar" (volver a pasar por el corazón") a tantas personas que subsisten, con sus idas y venidas, con sus mareas, con sus terremotos vitales, ... y toda clase de experiencias que les roban mucha energía y les impiden ese desarrollo digno.
Precisamente por eso, en pleno siglo XXI, sigue siendo urgente y necesario, nuevos profetas, quizá con otro corte o con nuevas técnicas, pero necesitamos hombres y mujeres, que como Jesús de Nazaret,  griten, hagan gestos y nos recuerden que un mundo mejor es posible. Profetas que denuncien ese tremendo desequilibrio, que ya es un abismo, que retrasa el desarrollo de tres cuartas partes de la población mundial, desarrollo, al que tienen derecho como tú y como yo.
Necesitamos profetas que nos pregunten: ¿tú que haces por un proyecto más humanizador?¿Buscas tu estabilidad a toda costa aunque aumente el desequilibrio? ¿Buscas el desarrollo de quien más lo necesita? Necesitamos profetas que nos hagan ver en la oscuridad, que aporten luz, sensibilidad, cercanía y compasión hacia aquello que muchas veces no queremos reconocer.
Todos hacemos algo... lo importante es reconocer en que dirección lo hacemos, y así, descubriremos lo que aportamos. ¡Ánimo!, nunca es tarde. Gracias

No hay comentarios:

Publicar un comentario