¿CÓMO PUEDE SER ESO?

Los encuentros tienen en muchas ocasiones sorpresas, que nos pueden llevar a donde uno no esperaba. El encuentro de ayer entre hermanos y laicos menesainos, hombres y mujeres, que compartimos  un mismo Proyecto y unas misma ilusiones, me hace pensar, que a pesar de nuestras múltiples resistencias, el Espíritu va haciendose hueco,  y logrando algo nuevo, ¿no lo veis?

Nacer de nuevo. Solo es posible para aquellosque buscan con honestidad. Solo es posible para lo que saben que no lo saben todo. Solo es posible para los que están dispuestos a mirar más allá,... aunque no sepan como. solo es posible para las personas que confían, se fían... tienen fe.

¿Cómo va se eso posible? Venciendo protagonismos, venciendo la tentación del poder, dejar de sentirnos imprescindibles, y estar dispuestos a recorrer el sencillo camino de haceme hermano. Nacer a la esencia de nuestra propia vocación, hacerme hermano en mi tarea cotidiana, como educador, en el patio, en los pasillos, hacerme hermano de mis alumnos y de quienes comparto día a día mesa y misa.

Hacerme hermano nos supone rehacer lazos, porque se rompen en la convivencia, con un perdón, que nos recuerda que Él comienza cada día de cero conmigo. Nos implica querer ,  y   que se note que nos queremos, en los gestos, en la complicidad, en hacer el bien. Es la esencia de nuestro ser, y si esto nos parece pura teoría, lo mejor es dejarlo, ser honestos.

Es posible, no estamos solos, en esta historia de fidelidad estáis muchos. Educadores, alumnos, catequistas, ... despertando en nosotros el deseo nacer de nuevo. ¡Gracias!

Pero somo cada uno, quienes, como Nicodemo, nos podemos acercar a Jesús y decirle ¿Cómo puede ser eso? Solo pregunta el que busca respuestas, el resto jugamos al escondite.

¡Feliz nacimiento de nuevo!