viernes, 1 de mayo de 2015

ACOGER LO QUE VIENE...

La realidad supera siempre a la ficción. Nos lo pueden contar, poner mil vídeos, pero vivirlo en primera persona no es fácilmente descriptible. Asumir la pérdida de todo cuanto se tiene, y se quiere, verte en la más absoluta intemperie, es difícil encontrar palabras para contarlo...
Mientras siguen creciendo los números, que no son simples números, son personas, hijos, padres, hermanos, o amigos de alguien, que buscan con impotencia... Mientras se suceden la evacuaciones de turistas y extranjeros,... Pienso en quienes se quedan, en quienes no tienen ningún sitio donde ir, en quienes no tienen a nadie que los lleve a ningún hogar seguro... Ellos ya lo perdieron todo.
Ellos, el Pueblo Nepalí, que ya tenían poco, y lo poco que tienen, lo comparten... ¿Quién mirará y dará la cara por ellos?¿Cuánto tiempo será portada de los noticieros?¿Cuándo dejaran de ser noticia y curiosidad para muchos y caer en el olvido?
Inexplicable madre naturaleza que irrumpe con dureza, sufriendo las consecuencias los más débiles.
Acoger lo que viene implica hacerse cargo, asumir consecuencias, aceptar que en mi mano y en las tuyas, siempre hay algo que hacer. Superemos la tentación de la distancia, de la indiferencia, y arrimemos en hombro  en apoyar la causa de quienes están sufriendo las consecuencias devastadoras de este terremoto. 
En las redes sociales, con apoyo económico, moral, humano, con la oración, con todo el equipo, con pequeños gestos, con ongs, con nuestras comunidades cristianas, ¡con todo!
Hagamos nuestra solidariamente su causa, para que sientan ese apoyo real y humano, que les ayude a acoger lo que viene. 


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